Intentando ser fiel a mi persona

     Últimamente han pasado muchas cosas y no sabría decir si son buenas o malas (como ya expliqué en mi anterior entrada), pero el verdadero problema que ahora me asfixia no es ese. Tampoco lo es el hecho de no poder controlar lo que ocurre una vez más en mi vida, a eso ya me he acostumbrado. Lo que ocurre es que tengo miedo. No estoy acostumbrada a ese sentimiento. Nunca me ha dado miedo el futuro ni los sucesos a los que me he tenido que enfrentar, y ahora tampoco le tengo miedo a nada de eso. Tengo miedo a traicionarme a mi misma.
     Desde que tengo memoria he tenido unos principios y unas ideas determinadas sobre la mayoría de cosas. Siempre he tenido determinado como manejar mi vida y como comportarme incluso. Pero ahora todas esas ideas a las que siempre he sido fiel y que siempre he obedecido se están viendo enfrentadas a una serie de sentimientos completamente opuestos.
     Siempre me he definido por hacer caso a mi cabeza y mi razón antes que al corazón y los sentimientos pero ahora estos están cobrando mucha más fuerza que antes. Ya no puedo actuar como si no existieran. Allá donde voy mi corazón me va hablando y volviéndome loca diciéndome que me muero de ganas por hacer justo lo contrario a lo que hago. De buena gana me sacaría el corazón del pecho en este instante.
     Lo peor de todo es que he llegado a plantearme si debería dejarme guiar por mi corazón y dejar de pensar en las cosas que hago. Pasar de pensar a sentir. Esa no soy yo. Yo no me paro a analizar sentimientos, yo evalúo situaciones y busco la mejor opción. Así es como yo soy, ni más ni menos. Puede que de esta forma no me esté yendo genial en la vida pero tampoco me va mal.
     Además, llevo tanto tiempo sin permitirme dejarme llevar por los sentimientos que si ahora lo hiciera es seguro que acabaría dando de bruces contra un muro. No soy capaz de expresar mis sentimientos con soltura, imagino que será la falta de práctica.
     Y a esto es a lo que hoy día le tengo más miedo en el mundo. Siento que si dejará de regir mi vida de la manera en que lo he hecho hasta ahora dejaría de ser yo misma, pero a la vez quizá la verdadera yo sea eso que dicen mis sentimientos.
     Ya vale de mierdas y rayadas mentales por esta noche, mi cerebro está demasiado cansado y no da para más, aunque creo que me ha hecho bien escribir esta entrada.


9/1/16

Comentarios

Entradas populares de este blog

Al gran amor de mi vida

Mi luz propia

Entrada rápida de desahogo